sábado, 6 de febrero de 2010

Justificación del proyecto.

La formación del Servicio Profesional Docente se basa en el modelo o modelos de formación inicial de docentes se ajusta a las características que debe tener un docente del siglo XXI para desempeñar su labor. Portilla (2002) a partir de Pérez Gómez (1992) distingue cuatro perspectivas básicas de los modelos de formación docente que se identifican con diferentes orientaciones de la enseñanza: Perspectiva o modelo académico.

Se fundamenta en la idea de que el proceso de enseñanza es el encargado de transmitir conocimientos. El profesor es un experto en algunas disciplinas y su misión es “enseñar” los contenidos de dicha disciplina a los alumnos, quienes deben “aprender” esos contenidos. La formación del docente estará relacionada, por tanto, con el dominio pleno de las disciplinas cuyos contenidos debe transmitir. En este enfoque de la docencia y la formación se pone el acento en que lo esencial es que el docente conozca sólidamente la asignatura que va a enseñar o impartir, lo cual supone priorizar la formación disciplinaria (Diker y Terigi, 1997) y considerar la formación pedagógica como superficial e innecesaria e incluso como un obstáculo para la formación docente (Davini, 1995).

 Este modelo, con sus variaciones, es seguido en algunos países, como España, para la formación inicial del docente de nivel medio superior. Donde se ofrece una formación pedagógica, de corta duración, a los titulados de las distintas carreras universitarias para poder ejercer la docencia en la enseñanza nivel medio superior. Esto implica que los docentes tengan CONEXIÓN TEORÍA-PRÁCTICA EN LA FORMACIÓN DOCENTE en lugar de  formarse y adquirir los conocimientos pedagógicos necesarios a lo largo de su ejercicio profesional, en su experiencia en el aula.

Dentro de esta perspectiva hay dos enfoques extremos: el enciclopédico y el comprensivo. En el enciclopédico la competencia del profesor reside en la posesión de los contenidos disciplinares requeridos y en la capacidad para explicar de manera más clara y orden dichos contenidos. Se evalúa principalmente la adquisición de los contenidos conceptuales y subsidiarios, dando menos importancia a la formación didáctica, contextual, en habilidades o competencias, actitudes, valores y destrezas que deben complementarse en la formación pedagógica del docente.
El enfoque comprensivo concibe al docente como un sujeto pensante que comprende la estructura lógica de la materia a impartir, sabe los conocimientos y el desarrollo histórico de los mismos y se propone que la enseñanza sea un conjunto de hechos interconectados. Para alcanzar este enfoque, la formación docente se debe sustentar en la comprensión de la estructura epistemológica y conceptual de las disciplinas.
 En ambos casos la formación del profesor se asienta en las adquisiciones de la investigación científica, ya sea disciplinar o de didáctica de las disciplinas (Pérez, 1992). Perspectiva o modelo técnico. Este modelo se preocupa por darle a la enseñanza un nuevo estatus, fomentando grandes avances en el estudio y desarrollo de la práctica docente. Aquí el docente es un técnico que busca “recetas de enseñanza” para tratar de llevarlas a la práctica, de manera que el alumno aprenda.
El problema aparece cuando no se tienen en cuenta el LA FORMACIÓN INICIAL PARA EL NUEVO PERFIL DEL DOCENTE DE NIVEL MEDIO SUPERIOR.

RELACIÓN ENTRE LA TEORÍA Y LA PRÁCTICA con un contexto social y las características intrínsecas de los alumnos y docentes que participan directamente en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

 Este enfoque “establece una distinción clara entre el conocimiento teórico y el conocimiento práctico y entiende el segundo como una aplicación del primero” (Diker y Terigi, 1997:115), de ahí el impacto que dicho modelo ha ejercido y ejerce sobre las prácticas, en particular, y la formación de los docente, en general.

Desde esta perspectiva se centra la atención en el conocimiento y las destrezas necesarias para la enseñanza, estando estas destrezas derivadas de la investigación proceso-producto: aprender a enseñar implica la adquisición de principios y prácticas derivadas de los estudios científicos sobre la enseñanza y la competencia se define en términos de actuación (Feiman-Nemser, 1990).

Uno de los programas más representativos  que se desarrolla en base a la reforma del Sistema Nacional de Bachillerato es desde esta perspectiva ha sido la Formación del Docente basado en Competencias, es decir, en las habilidades y destrezas necesarias para desarrollar la tarea.

Por ello la importancia de la Preformación y formación inicial de docentes de nivel medio superior. El profesor es, así, un técnico que garantiza su enseñanza si cumple con su función instrumental, donde a problemas concretos y generalizables deberá aplicar principios generales y conocimientos científicos, de tal modo que si los reproduce fidedignamente producirán los resultados requeridos.

Desde esta racionalidad instrumental se forman docentes en los que la práctica y la investigación están desvinculadas, y que en el desempeño de su tarea profesional se verán obligados a formarse sobre su propia experiencia docente.

De este enfoque se distinguen dos corrientes de la formación del docente: el modelo de entrenamiento, el más mecanicista, en el que la formación se sustenta en las relaciones entre los comportamientos de los CONEXIÓN TEORÍA-PRÁCTICA EN LA FORMACIÓN DOCENTE  docentes y el rendimiento de los alumnos.


La formación práctica de los profesores debería, según lo expuesto, estar orientada hacia el aprendizaje a través de problemas, donde se enfrente a los futuros docentes a experiencias de clase en las que tengan que trabajar en situaciones de asombro, de éxitos, de fracasos, de temores, de alegrías, de dificultades en manejar los procesos de aprendizaje o los comportamientos de los alumnos (Perrenoud, 2001). 

Concepciones de aprendizaje.

Dentro de las diferentes concepciones que se nos han presentado yo considero que una de las concepciones que más congruente con las competencias puesto que las competencias se basan en el saber-hacer. Y que sin embargo no podemos dejar al lado el conocimiento. Dichas concepciones son:


* Teoría del procesamiento de la información. La teoría del procesamiento de la información, influida por los estudios cibernéticos de los años cincuenta y sesenta, presenta una explicación sobre los procesos internos que se producen durante el aprendizaje. Sus planteamientos básicos, en líneas generales, son ampliamente aceptados. Considera las siguientes fases principales.

* Aprendizaje por descubrimiento. La perspectiva del aprendizaje por descubrimiento, desarrollada por J. Bruner, atribuye una gran importancia a la actividad directa de los estudiantes sobre la realidad.

* Aprendizaje significativo (D. Ausubel, J. Novak) postula que el aprendizaje debe ser significativo, no memorístico, y para ello los nuevos conocimientos deben relacionarse con los saberes previos que posea el aprendiz. Frente al aprendizaje por descubrimiento de Bruner, defiende el aprendizaje por recepción donde el profesor estructura los contenidos y las actividades a realizar para que los conocimientos sean significativos para los estudiantes.

* Constructivismo. J. Piaget, en sus estudios sobre epistemología genética, en los que determina las principales fases en el desarrollo cognitivo de los niños, elaboró un modelo explicativo del desarrollo de la inteligencia y del aprendizaje en general a partir de la consideración de la adaptación de los individuos al medio.

Desde mi punto de vista muy particular son estos los que más me han parecido hasta interesantes, y me gustaría conocer su postura y punto de vista, en sus comentarios.